CIUDAD RODRIGO: Antigua, noble y leal

Mi primera entrada en este blog tiene que ser, cómo no, dedicada a mi querida Ciudad Rodrigo.

 

Primero porque es un lugar maravilloso, único, un tesoro aún por descubrir, con un encanto especial y que todo el mundo debería de conocer.

Y segundo, porque es el lugar donde he pasado toda mi vida.

 

Hablar de Ciudad Rodrigo es hablar de monumentos, historia, leyendas, tradiciones y gastronomía.

 

Una vez que entras al casco antiguo, por una de las seis puertas medievales que dan acceso a su interior, será como si viajases al pasado y descubrirás una ciudad llena de sorpresas y curiosidades.

Protagonista de conflictos bélicos en innumerables ocasiones, debido a su situación transfronteriza con Portugal, vive durante los siglos XV y XVI los mayores años de esplendor. Gran parte de los monumentos que encontraréis pertenecen a esta época.



Puerta del Sol

 

 

La mejor manera de conocer la ciudad es perderse por las calles del centro histórico, y descubrir poco a poco los tesoros que se esconden tras la muralla medieval del siglo XII, por la cual puedes darte un paseo recorriendo sus algo más de 2km. de perímetro. Puedes empezar por lo que nosotros, los mirobrigenses, llamamos la zona de la "Batería", situada junto al Castillo de Enrique II de Trastámara, (hoy Parador Nacional de Turismo). Es un mirador desde el cual tendrás unas vistas preciosas del río Águeda, la zona de baño de "La Pesquera", el puente antiguo (en su origen romano), y los alrededores de Ciudad Rodrigo.

Vistas del río Águeda desde la muralla



Verraco y Castillo de Enrique II de Trastámara

 

En tu recorrido por la muralla encontrarás cañoneras, garitas, y podrás disfrutar del complejo sistema defensivo que posee la ciudad, lo que la convirtió en una de las plazas más fuertes de la Península.

Garita

 

 



Uno de los mejores lugares por donde empezar vuestra visita es sin duda la Plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad. Presidida por el Ayuntamiento, cobra máxima importancia durante la celebración del Carnaval del Toro, durante el cual la plaza se convierte en un singular coso taurino de forma rectangular, levantado por los mozos del pueblo, a base de maderas.

 

 

Ayuntamiento

 

 

Y hablar de la Plaza Mayor y del Ayuntamiento (cuya campana sirve de guía para indicar cuando hay toros sueltos por las calles), me obliga a hacer una parada para hablar de nuestro famoso Carnaval del Toro, uno de los más antiguos de España, como prueba un documento de tiempos de los Reyes Católicos en el que se recrimina a la ciudad el excesivo gasto en fiestas taurinas.

Declarado de Interés Turístico Nacional, durante cinco días el toro es el protagonista, con encierros, desencierros, capeas y novilladas, a pie y a caballo, por las calles de la ciudad. Farinatos y forasteros disfrutan por igual de esta fiesta, las charangas y su música, disfraces, carrozas y por supuesto mucha fiesta a todas las horas del día, y todo en medio de una extraordinaria animación callejera.

 

El Campanazo da el pistoletazo de salida al Carnaval

 



 



Capea en la plaza

                                                                         

 

De Ciudad Rodrigo podríamos decir que sus piedras hablan, pues recorriendo sus calles podemos ver el paso del tiempo y las huellas que ha dejado, como por ejemplo en la Catedral de Sta. María, tanto por los diferentes estilos arquitectónicos que posee, como en la fachada de su torre, en la que se pueden apreciar siglos después, las marcas de los cañonazos que sufrió principalmente durante la Guerra de la Independencia, por parte de los franceses, y durante la cual Ciudad Rodrigo jugó un papel fundamental.

 

Catedral de Sta. María

 

 

Y para resumir un poco, os voy a decir tres palacios que no os podéis perder:

 

- El Palacio de los Águila, con un precioso patio plateresco. Con un poco de suerte disfrutarás de alguna de las exposiciones que allí se muestran.

 

 

 

 

- La Casa de los Vázquez (hoy en día Correos), con una original fachada que simula la proa de un barco. No os podéis perder en su interior sus espectaculares artesonados, sobretodo el que se encuentra en la habitación donde está el mostrador de Correos, y que aunque ponga que turistas no (por ser pequeña la sala), por favor, silenciosamente entrar y verlo, porque merece la pena, además de la azulejería y rejas que posee.

 

 

 

- Y por último destacar la Casa Marquesa de Cartago, muy diferente al resto, y que para mí, su exterior es el más bello de la ciudad.

 

 

 

Esto es sólo un pequeño resumen de lo que os encontraréis en Ciudad Rodrigo, porque en vuestra visita descubriréis una ciudad llena de palacios, casonas, iglesias, plazas y plazuelas, además de algún que otro museo, destacando entre todos ellos por su originalidad, el Museo del Orinal, con más de 1300 piezas diferentes.

 

Si queréis más información turística sobre la ciudad, información sobre hoteles y casas rurales en Ciudad Rodrigo y los alrededores, todo tipo de actividades de ocio y grandes ofertas de alojamientos en la provincia de Salamanca,  la podéis encontrar en nuestra web http://www.viajaydescubresalamanca.com/.

 

 

 

Plaza del Buen Alcalde

 

 

Y para terminar, os doy un consejo: Mientras pateas, tapea.

Disfruta de la rica gastronomía de la ciudad, comiendo como decimos aquí unos "pinchitos", o sentándote a la mesa de alguno de los restaurantes que encontrarás por el recorrido. Te recomiendo que pruebes los huevos fritos con farinato, plato típico de la ciudad, unas patatas meneás, unos embutidos ibéricos o un buen asado.

Buen provecho.

 

Y nos vemos en Ciudad Rodrigo. ¡Te sorprenderá!